Interior de la cafetería Rolando tras el desescombro.
La bomba se colocó en Rolando, pero afectó a los locales contiguos. El restaurante Tobogán fue el que salió peor parado. En el resto de establecimientos no hubo que lamentar fallecidos.
En la misma calle del Correo estaba Pañería Inglesa, un negocio dedicado a la venta de telas. Como tenía horario partido no había nadie en la tienda a mediodía. Casi todo el material quedó inservible.
Dos de los empleados de la cafetería Yenes, José Herrero y su ayudante Manuel Crespo, resultaron heridos por el derrumbamiento de parte del techo. En la Perfumería Urquiola hubo daños materiales, al igual que en los pisos que estaban sobre Rolando.
El presidente del Gobierno, Carlos Arias Navarro, llegó a las 16:15 horas. Luego aparecieron otras autoridades. El príncipe Juan Carlos, que estaba en Palma de Mallorca, mandó un telegrama para mostrar su dolor. Días después visitaría a los heridos acompañado de la princesa Sofía.